Los herpes son pequeñas ampollas que a veces pican y que pueden aparecer tanto en el labio como en los genitales.
El herpes es una de las enfermedades más molestas, pero normalmente inofensivas. ETS. Se trata de pequeñas ampollas llenas de agua que suelen aparecer en el labio o en los genitales.
Los afectados las notan sobre todo cuando la piel está tensa o pica. El herpes suele aparecer en forma de varias ampollas de distintos tamaños y se considera especialmente contagioso. Esto significa que el virus puede transmitirse no solo por vía sexual, sino también a través de un beso o bebiendo del mismo vaso.
Curiosamente, sin embargo, algunas personas parecen ser más susceptibles que otras. Mientras que para muchos el herpes forma parte de la vida cotidiana, otras personas no desarrollan ampollas de este tipo en toda su vida. Pero: la enfermedad no suele estar causada por una higiene deficiente, sino -como muchas otras dolencias- contagiada por el virus asociado. O dicho de otro modo: quienes padecen herpes a veces simplemente tienen "mala suerte".
A menudo ya ayuda a combatir las dolencias correspondientes con la ayuda de pomadas y cremas. Muchos remedios están disponibles (sin receta) en la farmacia. Sin embargo, si no hay mejoría, es importante no posponer demasiado la visita al médico. De lo contrario, se corre el riesgo de que el herpes siga extendiéndose y restrinja la vida cotidiana de los afectados.
A menudo, los preservativos pueden ayudar a proteger contra la transmisión. Sin embargo, dado que los virus -especialmente en las primeras fases- aún no tienen que causar las características ampollas, es posible que la transmisión ya se esté produciendo cuando aún no hay nada visible.