El término "libido" se utiliza para describir el impulso sexual de las personas.
La "libido" es el impulso sexual humano que determina, entre otras cosas, la intensidad del deseo sexual. Dependiendo del carácter, la edad y otros factores, la libido puede unas veces aumentar y otras disminuir a lo largo del año.
Sin embargo, se trata de una interacción especialmente compleja. Entre otras cosas, mucho estrés y una vida cotidiana agitada pueden hacer que la libido de una persona se resienta visiblemente. Además, algunos medicamentos tienen un efecto positivo o negativo sobre la libido.
Resulta especialmente difícil cuando uno de los miembros de la pareja tiene muchas más ganas de sexo que el otro. Dependiendo del grado de tensión que esta diferencia suponga para la pareja, es importante buscar soluciones conjuntas.
Una libido en constante disminución -aparte de la medicación, el estrés, las enfermedades y demás- también puede ser un signo de que la relación está a punto de terminar. En este caso, los afectados ya no se sienten atraídos por su pareja, o ya no se sienten fuertemente atraídos. En cambio, sí muestran interés, por ejemplo, a la hora de buscar una nueva pareja. Lío de una noche o planear una aventura en crucero. Entonces, como muy tarde, es el momento de cuestionar la pareja y empezar a buscar soluciones. Esto también se aplica si la libido de la pareja es tan intensa que piensa exclusivamente en sexo todo el día y ya no puede concentrarse en nada más, posiblemente sea un adicto al sexo y también debería buscar asesoramiento.
Sin embargo, una cosa es cierta: las fluctuaciones a corto plazo de la libido son absolutamente normales.