Un código de vestimenta es una forma específica de vestir que debe respetarse en los actos, por ejemplo.
Un código de vestimenta tiene por objeto garantizar que los asistentes a eventos vistan con un estilo determinado. De este modo, el anfitrión puede influir decisivamente en el ambiente de su fiesta o del acto en cuestión. Para que todo el mundo esté realmente informado de los requisitos correspondientes, es importante, por supuesto, comunicarlos con suficiente antelación. Siempre merece la pena estudiar la invitación al acto -independientemente de la ocasión- para estar seguros.
Códigos de vestimenta venga en casinos y en el contexto de galas, pero también se utiliza a menudo en fiestas gays. Entre otras cosas, puede darse el caso en este último ejemplo de que a los invitados sólo se les permita vestirse con barniz y Piel se le permite el acceso. Esto le da la oportunidad de combinar el código de vestimenta imperante con una fiesta temática.
Dependiendo de la ocasión de la fiesta gay y de si el sexo también está en el orden del día, el código de vestimenta puede ser más o menos permisivo. Los anfitriones más estrictos pueden incluso llegar a negar la entrada a los visitantes que no sigan el código de vestimenta. Al fin y al cabo, de lo contrario existe un gran peligro de que todo el ambiente se resienta por culpa de quienes no se adaptan al concepto en cuanto a vestimenta. Especialmente en las fiestas sexuales, muchos invitados se sienten observados por personas con "ropa normal".
Sin embargo, también está claro que los códigos de vestimenta no son en absoluto un fenómeno puramente gay. Los códigos de vestimenta también pueden prescribirse para bodas y cumpleaños.