Estas especies animales son monísimas... y gays
Ahora que parece que vuelve un poco la normalidad tras la conmoción inicial de la crisis de Corona, muchos zoológicos vuelven a abrir sus puertas. Los visitantes no sólo tienen la oportunidad de maravillarse ante simpáticas suricatas y poderosos elefantes, sino que también pueden aprender mucho sobre sus (a veces más, a veces menos) peludos amigos.
Un aspecto podría sorprender a muchos: en el contexto de muchas especies animales, la homo- o bisexualidad no es en absoluto una rareza. Al contrario. Los animales parecen mucho más abiertos que muchos humanos a la hora de encontrar una pareja adecuada.
Pero, ¿qué especies animales son realmente homosexuales? La siguiente lista es sólo un extracto de las tendencias homosexuales en el reino animal y podría sorprender a unos u otros. Una cosa es cierta: los animales no conocen la homofobia.
Animal gay número 1: la jirafa
¿Te apetece un momento especial? La gran mayoría de las jirafas viven en pareja. Aquí se abrazan y se besuquean por todo lo que valen. En muchos casos, el sexo clásico entre jirafas es probablemente un mero "medio para un fin", que sólo sirve para la reproducción.
Animal gay número 2: el león
Aunque león y leona en el zoo siempre parecen la imagen clásica de un Recto-familia: ¡las apariencias engañan! En sentido estricto, muchos leones son auténticos "fanáticos del gang-bang". Viven en manada, se defienden unos a otros y practican sexo entre ellos.
Animal gay número 3: los macacos
Los monitos son unos de los animales que más disfrutan de la vida. Se sientan relajadamente en sus rocas, examinan a los visitantes del zoo y de vez en cuando también a sus congéneres. Sin embargo, a diferencia de muchas otras especies animales, no parecen dar demasiada importancia a las relaciones fijas. Más bien, pueden entusiasmarse con la aventura rápida de una noche.
Sin embargo, las relaciones lésbicas en el reino de los macacos son algo diferentes. Las hembras de macaco suelen tener relaciones muy profundas entre ellas y se protegen mutuamente.
Animal gay número 4: los cisnes
Los cisnes son de esos animales que, una vez que han entregado su corazón, se quedan con su pareja. Que la pareja sea macho o hembra es secundario. Una particularidad: los cisnes homosexuales también crecen juntos con el tiempo hasta formar una verdadera familia. Es decir: tras aparearse con un cisne hembra, los dos amantes ahuyentan a la madre, se reproducen y luego crían a las crías. A veces también ocurre que las aves homosexuales se convierten en padres adoptivos al hacerse cargo de los huevos abandonados en los nidos.
Por cierto: los cisnes no son las únicas aves que forman parejas para toda la vida. El reino animal ofrece numerosas pruebas de que la monogamia puede practicarse durante toda la vida.
Animal gay número 5: la oveja
En primer lugar: la mayoría de las ovejas son hetero. Sin embargo, siempre hay algunos ejemplares que -aunque podrían elegir entre una masa de ovejas hembras- optan por la variante del mismo sexo.
Sólo se puede conjeturar por qué es así. ¿Quizá se trate de una pasión innata por el propio sexo, que se manifiesta más en unos animales y menos en otros?
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